El certificado de excepcionalidad es un documento que certifica que una empresa no puede cumplir con la obligación de emplear al menos el 2% de trabajadores con discapacidad en su plantilla, como lo requiere la ley. Esta situación puede deberse a alguno de los siguientes motivos:

Imposibilidad de cubrir la oferta: En este caso, ni los Servicios Públicos de Empleo competentes ni las agencias de colocación son capaces de encontrar candidatos con discapacidad para cubrir la oferta de trabajo presentada. Esto puede deberse a la falta de demandantes de empleo con discapacidad disponibles, o a que, a pesar de existir, estos no estén interesados en las condiciones de la oferta.

Alegación de causas: Cuando existen factores de naturaleza productiva, organizativa, técnica o económica que hacen que sea imposible o complicado incorporar trabajadores con discapacidad en la empresa, se puede alegar esta causa como justificación para no cumplir con la cuota obligatoria.

En resumen, el certificado de excepcionalidad es un documento que respalda la imposibilidad de una empresa para cumplir con la cuota de empleo de personas con discapacidad, proporcionando razones específicas, ya sea la imposibilidad de encontrar candidatos adecuados o la existencia de obstáculos técnicos, organizativos o económicos.